LA OBESIDAD SEVERA MERMA LA RESPUESTA INMUNITARIA PROVOCADA POR LAS VACUNAS CONTRA EL COVID-19
Los adultos con obesidad severa desarrollan una respuesta inmunitaria mucho más débil a la vacunación contra el COVID-19 que los adultos con un peso normal. Así lo ha constatado una nueva investigación presentada en el Congreso Europeo sobre Obesidad (ECO) de este año, celebrado en la ciudad de Maastricht, en los Países Bajos.
La obesidad severa es una enfermedad que complica la evolución de los pacientes infectados por COVID-19. Esto es algo que ya se conocía, pero en el nuevo estudio realizado por el profesor Volkan Demirhan Yumuk y su equipo de investigadores de la Universidad de Estambul (Turquía), se ha descubierto también que las personas con un Índice de Masa Corporal (IMC) por encima de 40 kg/m2, generan muchos menos anticuerpos que las personas con un peso normal después de la vacunación.
Con el objetivo de conocer las causas e indagar en la producción de anticuerpos tras las vacunas, el equipo de investigadores analizó las respuestas de los anticuerpos en 124 personas con obesidad severa de entre 42 y 63 años, después de ser vacunados con las soluciones de Pfizer/BioNTech y CoronaVac. Asimismo, reunieron a un grupo de control de 166 adultos con un peso normal, que tenían un IMC inferior a 25kg/m2, y una edad comprendida entre los 39 y los 47 años.
Los investigadores midieron los niveles de anticuerpos en las muestras de sangre tomadas a los pacientes y se formaron varios grupos según los antecedentes de infección, separando a los que habían tenido previamente COVID-19 de los que no. Del total de pacientes, 130 recibieron dos dosis de Pfizer/BioNTech y 160 participantes dos dosis de CoronaVac, de los cuales 70 tenían una infección previa por SARS-CoV-2.
Del grupo de pacientes sin infección previa y vacunados con Pfizer/BioNTech, los pacientes con obesidad grave registraron niveles de anticuerpos más de tres veces inferiores a los de los pacientes de peso normal. Para ser más exactos, los pacientes con obesidad grave desarrollaron una media de 5.823 UA/ml y los pacientes con un peso normal 19.371 UA/ml.
En aquellos casos en los que los pacientes sí habían pasado el COVID-19 anteriormente, los niveles de anticuerpos entre un grupo de pacientes y el otro no fueron significativamente diferentes, ya fuesen vacunados con Pfizer/BioNTech o CoronaVac.
Otro de los descubrimientos fue que, en los pacientes con obesidad grave, con y sin infección previa por SARS-CoV-2, los niveles de anticuerpos eran significativamente mayores en los vacunados con Pfizer/BioNTech que en los vacunados por CoronaVac.
El profesor Yumuk explica que "estos resultados proporcionan nueva información sobre la respuesta de los anticuerpos a las vacunas contra el SARS-CoV-2 en personas con obesidad grave y refuerzan la importancia de priorizar y aumentar la aceptación de la vacuna en este grupo vulnerable".
Además, añade que el estudio "confirma que la memoria inmunitaria inducida por una infección previa altera la forma en que las personas responden a la vacunación e indica que dos dosis de la vacuna de Pfizer/BioNTech pueden generar una cantidad significativamente mayor de anticuerpos que CoronaVac en personas con obesidad grave, independientemente de los antecedentes de infección”. Sin embargo, señala que “es necesario seguir investigando para determinar si estos niveles más altos de anticuerpos proporcionan una mayor protección contra COVID-19".
Elena Vivar