EL GRUPO SANGUÍNEO INFLUYE EN LAS INFECCIONES POR CORONAVIRUS
Un estudio publicado en la revista Blood Advances y otro elaborado por el Banco de Sangre y Tejidos de Cataluña y la Universidad de Barcelona detallan la influencia que tiene el grupo sanguíneo a la hora de contraer el COVID-19. Ambos estudios coinciden en la predilección que tiene el SARS-CoV-2 por el antígeno del grupo sanguíneo A que se encuentra en las células respiratorias.
Los investigadores del estudio publicado en Blood Advances analizaron antígenos sintéticos de grupos sanguíneos en glóbulos rojos y respiratorios de individuos con los grupos sanguíneos A, B y O, y evaluaron cómo interactuaba el RBD -la parte del virus que se adhiere a las células- del SARS-CoV-2 con cada tipo de sangre. Acabaron detectando que el RBD tenía una fuerte tendencia a unirse e infectar al grupo sanguíneo A que se encuentra en las células respiratorias.
“Es interesante que el RBD viral solo prefiera el tipo de antígenos del grupo sanguíneo A que se encuentran en las células respiratorias”, afirma Sean R. Stowell del Hospital Brigham and Women’s de Boston, uno de los autores del estudio. Además, añade que a pesar de que “el tipo de sangre es un reto, porque se hereda y no es algo que podamos cambiar”, si se estudia y comprende mejor cómo interactúa el virus con los diferentes grupos sanguíneos “es posible que se puedan encontrar nuevos medicamentos o métodos de prevención”.
Asimismo, y tras la exposición de los resultados obtenidos el equipo insistió en que sus hallazgos no pueden describir completamente cómo los coronavirus inciden en los organismos en función del tipo de sangre: “Nuestra observación no es el único mecanismo responsable de lo que estamos viendo clínicamente, pero podría explicar parte de la influencia del tipo de sangre en la infección por COVID-19”.
Desde el estudiorealizado por el Banco de Sangre y Tejidos de Cataluña y la Universidad de Barcelona, señalan que los grupos sanguíneos no sólo determinan el riesgo de contagio si no también la evolución de la enfermedad. Para realizar su estudio, el equipo de investigadores analizó muestras de sangre de donantes que pasaron el COVID-19 y también la de un grupo de pacientes infectados que fueron hospitalizados y recibieron sangre para su tratamiento.
En el primer grupo se observó que los donantes de sangre del grupo 0 tienen un "riesgo significativamente más bajo de infección" que los que no son de este grupo. Esto puede explicarse porque las personas del grupo 0 tienen más defensas que actúan contra los antígenos con los que se manifiesta el virus SARS-CoV-2.
El investigador principal del estudio, Eduardo Muñiz, explica que “además del grupo sanguíneo A-B-O, también tenemos unos anticuerpos dirigidos contra los grupos A-B-O”, que son diferentes del grupo al que pertenecemos. “Así, las personas del grupo A tienen anticuerpos contra la sangre del tipo B; los del grupo B tienen anticuerpos contra el grupo A; los AB no tienen anticuerpos y los del grupo 0 tienen anticuerpos contra el A y el B".
La proteína S del virus que es la encargada de infectar las células del organismo tiene una estructura similar a la de los grupos sanguíneos A-B-O y esto, según Muñiz, hace que “cuando el virus llega al organismo de una persona del grupo sanguíneo 0, su cuerpo reaccione utilizando los anticuerpos que hay en la sangre para atacar el virus, dificultando su propagación en el organismo".
Esta relación entre grupo sanguíneo y COVID-19 deja de estar presente en pacientes que han sido hospitalizados y han recibido transfusiones. Tal y como se afirma en el estudio, la edad mucho más avanzada de los enfermos junto a un sistema inmune debilitado hace que el riesgo sea el mismo independientemente del grupo sanguíneo.