LA AGENCIA EUROPEA DEL MEDICAMENTO APRUEBA LA VACUNA JANSSEN
El pasado jueves día 11 de marzo, la Agencia Europea del Medicamento (EMA) dio el visto bueno a la vacuna de Janssen fabricada por la farmacéutica estadounidense Johnson&Johnson. Se trata de la primera vacuna con pauta de una sola dosis que se podrá suministrar en los países de la Unión Europea junto con las otras vacunas de AstraZeneca, Moderna y Pfizer, con las que ya se está inmunizando a parte de la población.
La Comisión Europea tiene firmado un acuerdo con la farmacéutica estadounidense para comprar 200 millones de dosis y poder solicitar una nueva remesa de otros 200 millones. La previsión, según ha afirmado Johnson&Johnson, es que los primeros 200 millones de dosis lleguen durante el 2021. A España le corresponde un 10% del total, es decir, 20 millones.
Desde la farmacéutica ya han advertido a la Comisión Europea que el envío de vacunas podría sufrir retrasos debido a problemas en la producción: “Desafortunadamente, J&J no empezará a despachar inmediatamente después de recibir la autorización, como sí ocurrió, por ejemplo, con BioNTech-Pfizer en diciembre”, ha explicado el eurodiputado alemán del grupo Popular, Peter Liese, en declaraciones a la agencia Reuters. Con todo, está previsto que a España lleguen las primeras dosis a partir del 15 de abril.
Las esperanzas en esta vacuna son muy altas. Su administración en una sola dosis "va a agilizar muchísimo el ritmo de vacunación por cuestiones de logística", afirmó la ministra de sanidad Carolina Darías. Además, su conservación no requiere temperaturas muy bajas como es el caso de las vacunas de Pfizer y Moderna, lo que favorece el transporte y logística. La vacuna de Janssen puede almacenarse a una temperatura de entre 2 y 8 grados hasta tres meses, y hasta dos años entre los -25 y -15 grados.
La tecnología que utiliza para inmunizar es la misma que la de AstraZeneca-Oxford o Sputnik, un adenovirus que se manipula genéticamente para que no pueda replicarse y que porta la proteína S del SARS-CoV-2, que es contra la que combate el organismo al detectarla como un cuerpo extraño.
Con respecto a su efectividad y en líneas generales, un ensayo clínico realizado a 44.000 personas mayores de 18 años de Estados Unidos, Sudáfrica y países de América Latina, concluyó que la vacuna reducía al 67% el número de casos sintomáticos de coronavirus a las dos semanas de inyectarse la vacuna. Asimismo, la efectividad de esta vacuna asciende al 85% en casos graves de COVID-19 y evita el 100% de las muertes.
En relación a las nuevas variantes, la farmacéutica Johnson&Johnson al extender su ensayo clínico por Sudáfrica y América Latina ha podido probar la efectividad de su vacuna en algunas de las nuevas cepas del virus. La efectividad de la vacuna en los voluntarios que participaron en el ensayo clínico de América Latina fue del 66% y del 57% en los de Sudáfrica. Para realizar el estudio se inoculó la vacuna a la mitad de los voluntarios y una inyección placebo a la otra mitad. Tal y como recoge la Agencia Federal del Medicamento , después de haber pasado 28 días de la vacunación, hubo contagios, pero ninguno de los pacientes que recibieron la solución de Janssen murió por COVID-19 ni requirió hospitalización.
Los efectos secundarios son muy parecidos a los de la vacuna de AstraZeneca. El documento por la FDA detalla algunos de los efectos adversos más comunes tras la aplicación de la vacuna de Janssen, que son, dolor de cabeza y fatiga. Se registraron también otros síntomas como fiebre, náuseas, dolor muscular y enrojecimiento e hinchazón en la zona de la inyección. El Ministerio de Sanidad ya aconsejó el tratamiento con Paracetamol antes y después de la vacunación con AstraZeneca, y parece que con la de Janssen podría pasar lo mismo ya que, según el estudio de la Agencia Federal del Medicamento, el 26,4% de las personas entre 18 y 59 años y el 9,8% de las mayores de 60 años a las que se les inoculó la vacuna necesitaron un tratamiento de analgésicos tras la inyección.