LO QUE NO DEBE CONFUNDIRTE A LA HORA DE HACER UN PODCAST -
En radio.urjc.es hemos publicado distintos artículos con afán de ayudar e incentivar a adentrarse en el mundo de la radio, ya sea utilizando los estudios de vuestra institución o con medios personales adaptados a los posibles de cada uno. Igualmente hemos ofrecido consejos para las primeras experiencias haciendo radio, así como hemos mostrado las posibles ventanas de explotación de vuestros programas, también hemos hablado de cómo dirigirte al micro, e incluso se publicó una lista de sugerencias para un uso óptimo de la música. Es decir, desde RADIO URJC queremos motivaros para que la creación de contenidos de radio sea una realidad.
Ahora vamos a comentaros qué es lo que no debe confundiros para que vuestros programas prosperen y crezcan oportunamente.
Por ejemplo, la sencillez y facilidad del medio. Cierto es que la radio en comparación con otros medios como la televisión o el cine simplifica los requerimientos operativos, pudiendo resultar una ventaja a priori, pero pensar que esa sencillez automáticamente va a posibilitar el éxito del contenido es un grave error. Hacer un programa de radio frente a otros medios puede aparentar ser sencillo, pero os podemos asegurar que hacer un programa radio de calidad, con todos los elementos radiofónicos posibles y que comunique, no lo es. No es una mera cuestión de presentar unos contenidos de forma más o menos ordenada, es algo mucho más complejo. Lograr transmitir lo que se quiere hacer llegar con la intención y sentido pretendido, va mucho más allá. Eso significa trabajo y más trabajo, errar muchas veces y analizar los errores y los aciertos.
Otro aspecto que no debería ser el motor principal de la producción de podcast es el económico. Es decir, sin duda se pueden hacer cosas muy buenas a bajo coste, pero sería una equivocación pensar que el coste de la producción (alto o bajo), es el principal factor que debe motivarte a la hora de producir. No todo el mundo dispone de los mismos medios y posibilidades, por lo que tener cabeza a la hora de acometer una producción resulta inteligente, pero ¡por favor!, no empieces a hacer un podcast sólo por una cuestión económica. En realidad hay muchas formas de producir y dar a conocer los contenidos, pero qué duda cabe que si deseas montar tu propia plataforma con la cobertura mínima necesaria, ese coste empezará a incrementarse por distintas razones: tecnológicas, derechos, etc. Por tanto, sí, hacer radio puede tener un coste reducido, pero la inversión puede necesitar ampliarse a medida que el proyecto crece. La calidad de un contenido no depende directamente del coste del producto, pero sin duda éste puede afectar en cierto nivel de explotación.
Otro concepto a tener en cuenta es la audiencia. ¿Qué buscamos? ¿Sólo nos motiva a realizar radio el tamaño de la audiencia? ¿En realidad qué queremos, poder comunicar o es un simple ejercicio de vanidad? En los últimos años el fenómeno podcast ha aumentado su número de oyentes, siendo en España cada vez más los aficionados a este formato. No obstante, existe una oferta amplísima de podcasts, por lo que lograr buenos datos de audiencia es un reto muy exigente que puede provocar desánimo y desesperación. Por tanto, confundir los objetivos o establecer unos objetivos de entrada inalcanzables no sólo es desacertado, puede ser un gran error. Ante todo es oportuno plantearse bien qué es lo que se pretende, y por tanto, qué es lo que necesita tu programa. Consolidar un trabajo, aunque sea con poca audiencia, puede ser un buen inicio, en ocasiones una catapulta hacia lo deseado. Lograr que un grupo de personas reconozca y valore el trabajo bien hecho, aunque sea un grupo reducido, ya es un éxito.
Y por último, hacer un podcast sólo por motivación económica es legítimo, pero tal vez no sea un motor muy duradero en la mayoría de los casos. Es lógico que los proyectos tengan objetivos de distinta índole, entre ellos económicos, pero establecer el objetivo económico como único fin en un podcaster novel puede llegar a ser igual de frustrante que lo dicho en el punto anterior. Si ese es tu único objetivo tendrás que tener en consideración que el nivel de competencia sí te exigirá buscar el máximo rendimiento comunicativo, lo que te puede obligar a entrar en requerimientos económicos de índole superior.
En conclusión, a la hora de hacer radio, hagas la temática o el tipo de programa que hagas, es importante que disfrutes con lo que haces y que ante todo prime el deseo de comunicar y compartir tu contenido, y si es posible, lograr tu intención comunicativa. Hacer radio puede ser un verdadero arte. El arte de comunicar y transmitir sentimientos, de establecer una relación con las personas que te escuchan.