DESARROLLAN ÚTEROS SINTÉTICOS SUPERVISADOS POR INTELIGENCIA ARTIFICIAL
Científicos chinos del Instituto de Ingeniería y Tecnología Biomédica de Suzhou han llevado a cabo un estudio en el que aseguran haber desarrollado un útero sintético para la gestación de fetos bajo supervisión de una inteligencia artificial.
La investigación, revisada por pares y publicada en ‘Journal of Biomedical Engineering’, presenta estos úteros sintéticos como “dispositivos de cultivo de embriones a largo plazo” formados por un cuerpo central dividido en varias cubetas.
El experimento se ha llevado a cabo con fetos de ratones que crecen en el interior del aparato, sumergidos en nutrientes en estado líquido. Este nuevo dispositivo lleva incorporado un software que se encarga de monitorear la evolución de cada uno de ellos contantemente, adaptando y calibrando variables como el nivel de dióxido de carbono y la alimentación necesaria para propiciar unas condiciones óptimas para la vida.
Según explica Sun Haixuan, científico que ha liderado el equipo investigador de la institución, el funcionamiento del sistema consiste en clasificar a los embriones en relación a su estado de salud y desarrollo.
El dispositivo cuenta con un sensor óptico capacitado para vigilar los embriones y proporcionar información clave sobre su crecimiento. La información generada está controlada por una inteligencia artificial capaz de detectar hasta el más mínimo cambio en el estado de los embriones y reajustar los niveles de nutrientes y oxígeno necesarios para el correcto desarrollo.
En el caso de detectar defectos graves o cigotos inviables el dispositivo tiene la capacidad de alertar a un técnico, pero también es capaz incluso de proceder a la eliminación del receptáculo. Aun así, hay que apuntar que este aparato no se trata de un útero artificial completo, puesto que las crías de ratón no completan ni finalizan su desarrollo hasta llegar al nacimiento.
Los investigadores aseguran que la tecnología desarrollada durante la investigación tiene la capacidad para gestar embriones humanos durante largos periodos de tiempos, aunque todavía no han podido llevarlo a la práctica. Las leyes internacionales prohíben la experimentación con embriones humanos más allá de las dos semanas de desarrollo.
Por su parte, los científicos aseguran que “todavía hay muchas incógnitas sin resolver sobre el proceso fisiológico del desarrollo normal de los embriones humanos”. Además, destacan que “el estudio del proceso de desarrollo embrionario humano no solo ayuda a las personas a comprender mejor el origen de la vida y el desarrollo embrionario, sino que también proporciona una base teórica para resolver los principales problemas de salud reproductiva como los defectos de nacimiento”.
Elena Vivar